Queríamos hacer un voluntariado para estar un tiempo sin
gastar dinero, la verdad. Cada día vas gastando de la saca pero no entra nada,
y nos pareció que trabajar a cambio de alojamiento y comidas era un buen trato.
Por otro lado, buscábamos vivir el país de otra manera, con una familia de
aquí, al estilo chileno, y descansar la espalda de nuestras cada vez más
pesadas mochilas. Al final, la familia que nos acogió fue bastante
internacional, chileno-inglesa, y acabamos realmente contentos con la
experiencia.
Cuando te das de alta en Workaway tienes que pagar una cuota
que te permite disfrutar de los servicios de la web durante dos años. De modo
que, quién sabe, si regresamos a España y no encontramos trabajo… ¡podemos
probar con los voluntariados! Al estilo de Facebook, hay que rellenar un
formulario y enviar solicitudes a las ofertas que más te gustan del país en el
que estás interesado en voluntariar.
Tras dos intentos que al final se quedaron en nada, nos
escribieron de Tumuñán, un lodge ubicado a un par de horas de Santiago de Chile
y al que todo aquel que ande cerca le recomendamos que no pierda la oportunidad
de ir. Entre montañas y a un paseo de una laguna maravillosamente refrescante,
es un lugar al que uno se retira para descansar, pensar, leer o no hacer nada y
comer bien, aquí os dejamos la web: www.tumunanlodge.com
Otro miembro de la familia, Bernard |
Más miembros de la familia |
Pero también hay que decir que durante nuestra estancia no
todo fueron flors i violes, que bien nos ganamos cada cacho de pan. Hicimos de
todo: cocinar, planchar, arrancar maleza, cuidar el huerto, de los niños, poner
la mesa, hacer camas, limpiar habitaciones, construir un arco, regar las viñas,
salir de caminata y bañarnos en la laguna, comer helado, disfrutar con los
asados y conocer a gente estupenda. Estas cinco últimas cosas fueron las que
más nos gustaron, aunque lo de los niños y lo del arco tampoco estuvo nada mal J
Produciendo miel |
La verdad es que a pesar de los madrugones y de la parte del
trabajo, lo pasamos muy bien. La familia nos hizo sentir genial, los niños eran
monísimos ¡y tuvimos la suerte de conocer a Agustín, Hernán y Pato! El primero
trabaja en el lodge, los dos últimos… fueron clientes permanentes durante largo
rato, por así decirlo J
Todos nos acogieron de maravilla.
Momento de relajación |
Después de mucho pensarlo, al fin salté |
Desde aquí os mandamos un beso gordo a todos. ¡Suerte!
Vaya experiencia!!! Qué guay y qué duro a la vez... pero de todo se aprende, no?
ResponderEliminarMuak
Fátima! Qué ilusión! :) Pues sí, toda una experiencia. A ver si tenemos suerte y podemos repetirla en Argentina.
EliminarBesos!!
gracias por la mención jijiji
ResponderEliminartienes que colocar la foto de Fran armando el arco que construimos !!