Llevábamos unos días de mucho bochorno, y la verdad: si tiene que hacer bochorno, por lo menos que haga solete, porque si encima llueve y te tienes que quedar en casa, malo. Así que cuando vimos que hacía día de playa, para Akumal que nos fuimos.
Nos lo pasamos muy muy bien. Y eso que llegamos a pensar que se nos iba a resistir y que tendríamos que dejarlo para otro viaje. Pero creo que la clave está en no preocuparse y en contagiarse del suave ritmo caribeño.
Poco vamos a decir de lo mucho que nos ha gustado Akumal. En este caso, todo se explica mejor con imágenes:
La fiesta que vivimos esa misma noche también se explica mejor con imágenes. Pero, de momento, vamos a guardarlas bajo llave, aunque alguien ya haya filtrado algunas en FB… ;)
Que guaaayY!! Acordaros de mi postal ehh antes de iros!! :p
ResponderEliminar